Por segundo año consecutivo la Red Nacional de Mujeres en Defensa de la Madre Tierra – RENAMAT junto al Colectivo CASA promueven una eco alternativa productiva frente al despojo minero y al cambio climático a través del trabajo colectivo, solidario, lleno de saberes de las mujeres y en un espacio en el que se reúnen esperanzas y agradecimiento a la madre tierra, como es el huerto comunitario.
Después de haber iniciado el trabajo con la tierra, sembrado, regado y cuidado de su producción, con mucho orgullo y alegría, las mujeres defensoras junto a sus niños se organizaron el pasado 8 de abril, para desarrollar el trabajo de cosecha de papa, mostrando que debemos cuidar a la Madre Tierra porque es quien nos da los alimentos sanos, de esta manera desarrollamos economía comunitaria y a portamos a la seguridad y soberanía alimentaria.
Las defensoras de la RENAMAT – mujeres articuladas de diferentes comunidades afectadas por la minería y otras que están en resistencia- llegaron a la parcela con sus herramientas de trabajo (liukanas, canastas y saquillos), compartieron conocimientos sobre bio indicadores, técnicas de trabajo y saberes ancestrales, entre mujeres jóvenes y mayores de la organización, muchas de ellas no tienen experiencia de trabajo en producción porque sus terrenos están contaminados por efectos de la minería, pero con el huerto comunitario tienen la oportunidad de aprender y de tener alimentos.
Divididas en el trabajo, mientras unas cosechaban lo producido entre risas y masticando coca, otras trabajaron en la elaboración de los hornos de barro para hacer cocer la papa y los alimentos, terminado el trabajo se compartió un apthapi a la hora del almuerzo, recordando las costumbres y vivencias con sus abuelos a la hora de compartir una deliciosa “Wathia”, con una rica phasa.
Pero no podía faltar la reciprocidad con la «Pachamama», en agradecimiento por la producción de alimentos, por la unidad de las mujeres defensoras, por la solidaridad entre unas y otras, es así que se ofreció un ritual con ofrendas de mesa blanca y kh´oa.
El huerto comunitario es una eco alternativa que está permitiendo revalorizar el trabajo de las mujeres en el campo y transformar los sentires de desesperación y desánimo por los efectos de la contaminación y el cambio climático, en una resistencia común, alegre y solidaria, es así que cada defensora retornó a casa con una bolsa grande de papá para compartir con familia.