La minería despoja también de las economías locales, economías campesinas basadas en el trabajo colectivo se ven desmontados porque se afectan los territorios destinados a la vocación agrícola y ganadera. El valioso trabajo de las mujeres en el sostenimiento de la economía campesina se invisibiliza y se pierde de vista el rol de las mujeres en la resistencia de la comunidad.
Entre el 24 de junio y el 2 de agosto se realizaron en las comunidades de Realenga y de Tolapampa dos ferias productivas que tenían como finalidad mostrar la capacidad productiva de los pueblos y el valor del trabajo femenino.
En la feria se exponen productos como: papa, habas, zanahorias, cebolla, yogur, queso, tejidos a máquina, estando presente también las panificadoras, estas ferias muy grandes muestran no sólo la capacidad de producción campesina, sino la diversidad para una dieta y soberanía complementaria.
Las defensoras de la Red Nacional de Mujeres en Defensa de la Madre Tierra (RENAMAT) y el Colectivo de Coordinación de Acciones Socio Ambientales (Colectivo CASA) a invitación de las autoridades originarias de ambas comunidades participaron con letreros de posicionamiento político con las siguientes consignas:
- Las mujeres tenemos derecho a la soberanía alimentaria.
- Las mujeres de Realenga tenemos derecho a la salud a la economía y a un medio ambiente sano.
- Apoyando y reconociendo el trabajo de las mujeres en el campo.
El reconocimiento de este trabajo se realizó en un acto simbólico en el que se nombraron los mejores productos con una evaluación y calificación comunitaria por parte de las autoridades indígenas originarias. Las responsables de entregar los reconocimientos y premios que consistían en enseres y bañadores para el hogar eran las defensoras de la RENAMAT, así en este intercambio y reconocimiento entre mujeres se posiciona el valor del trabajo campesino.
En el caso de Tolapampa, resaltó el trabajo de exposición de ganado vacuno, al mismo tiempo de papa, yogurt, queso, productos elaborados artesanalmente por las mujeres como mermeladas y otras. Es importante resaltar el trabajo conjunto con las autoridades indígena originarias de las comunidades en el valor del trabajo productivo que es una de las principales estrategias para demostrar que las economías locales pueden hacer frente a la minería que no lleva desarrollo, sino sólo contaminación y despojo.